domingo, 23 de noviembre de 2014

Billetes al peso (Fariña style)

—Tal vez no cuenten los fajos. Tienes billetes de cincuenta y de cien mezclados, cinco mil por paquete, la mitad de eso en un fajo de billetes de cincuenta, ¿de cuántos fajos estamos hablando, si llegamos a medio millón? De cien, si son todos billetes de cien, así que digamos ciento veinte, ciento treinta, algo así.
—Suena bien.
—No sé. ¿Tú lo contarías? Se cuenta en un negocio de droga, pero tienes tiempo, te sientas tranquilo, cuentas el dinero e inspeccionas la mercadería. Es una historia diferente. Aun así, ¿sabes cómo cuentan los grandes traficantes, los tipos que ganan más de un millón en cada transacción?
—Sé que los bancos tienen máquinas que pueden contar un fajo de billetes tan rápido como uno puede peinarlos.
—A veces usan ésas —dijo—, pero la mayor parte de las veces es al peso. Sabes cuánto pesa el dinero, así que sólo lo cargas en la balanza.

(Lawrence Block, Paseo entre las tumbas, Buenos Aires, Emecé, 1994, pág 256)


No hay comentarios:

Publicar un comentario